Cómo combatir la baja autoestima

Algunas claves para entenderla y superarla

No es la primera vez que escribo en el blog sobre este tema, pero he sentido el impulso de volver a hacerlo porque en los últimos tiempos me han llegado varios clientes que sufren de baja autoestima, y ello está causando un tremendo impacto en sus vidas. Sufren por la baja valoración que tienen de sí mismos y porque al mismo tiempo, eso les está alejando de sus metas en la vida, no encuentran la motivación suficiente para mejorar su situación y ello les lleva a la inacción, por lo que su situación se agrava. Esto me ha conducido a reflexionar más sobre el tema y a intentar meterme más en su piel: ¿cómo piensa, siente y actúa una persona que tiene esta dolencia? ¿Qué podría hacer para salir de su situación?

Baja autoestima

Alguien con baja autoestima se encuentra metido en un círculo vicioso: sabe que tiene que hacer algo para mejorar su situación y salir de su estado de insatisfacción pero, al mismo tiempo, no se ve con fuerzas para hacerlo ya que precisamente, esa falta de autoestima, hace que «no se vea capaz». Aunque tenga recursos para salir del problema (todos los tenemos) es incapaz de encontrarlos, «cree» que no puede y ello contribuye a su vez a que su autoestima se vea más perjudicada. ¿Qué está pasando? La Programación Neurolingüística nos dice que para obtener mejores resultados en nuestra vida, tenemos que poner a nuestro cerebro a trabajar a nuestro favor, y pienso que la gente aquejada de baja autoestima, sigue el proceso contrario. Eso sí, no es que lo hagan a propósito para hacer su vida más dolorosa, sino que pienso que se producen en la persona mecanismos inconscientes de los que ella misma ni se da cuenta, ni es capaz de controlar. Opino que Carl Jung, fundador de la Psicología Analítica, tenía mucha razón cuando decía lo siguiente:

baja autoestima

Y aquí viene lo complicado, ¿cómo hacer que una persona con baja autoestima se haga consciente de los mecanismos que su cerebro y su organismo está empleando para que vea la realidad de esa manera?

Tu cerebro te la está jugando

En varias ocasiones os he hablado en el blog de la Programación Neurolingüística (PNL) y de su idea de cómo la persona construye su realidad. Todos percibimos la realidad a través de nuestros sentidos y tomamos ese fenómeno externo y hacemos una representación interna del mismo. Esa representación subjetiva nunca es una réplica exacta ya que cada persona realiza una filtración basada en sus propios valores y creencias, recuerdos, experiencias, bagaje socio-cultural, etc… y sólo permitimos entrar en nuestro «mapa» aquello que nuestro filtro personal nos permite, es decir, aquellas cosas para las que nuestros filtros han sido sintonizados. ¿Qué pasa entonces con las personas que tienen baja autoestima? ¿Qué información será la que permitan entrar en su mapa respecto a todo el abanico de estímulos que se produzcan en el exterior? Probablemente, información que confirme la hipótesis sobre su propia valía personal: «podrías haber hecho esto mucho mejor», «hoy se te ve cansado», etc. Cazan al vuelo las críticas y, sin embargo, no aceptan los cumplidos. Muchas veces les intentamos apoyar diciéndoles todo lo que valen y todo lo que pueden ser capaces de conseguir y, aunque son mensajes totalmente bienintencionados y, seguramente, creídos con firmeza por quien los dice, son rechazados por la persona porque hasta que ella misma en lo más profundo no crea que eso es cierto, no te va a «comprar» el mensaje.

baja autoestima

Además de poner el foco en los aspectos negativos, la persona con baja autoestima suele dar mucho peso a las malas experiencias pasadas. Tiende a recordarlas con mucha frecuencia reviviéndolas una y otra vez como si estuviesen teniendo lugar en ese mismo momento y, seguramente, a todo nivel de detalle, llegando incluso a reproducir las conversaciones que tuvieron lugar en un momento percibido por ellas como negativo. Tienden a acordarse de los errores o fracasos pero no a resaltar los logros y normalmente, son muy exigentes con sus metas, poniéndose el listón muy alto, por lo que difícilmente estarán satisfechos con la consecución de objetivos que estén por debajo de esas altas expectativas. En mi práctica profesional, encuentro que la baja autoestima va normalmente acompañada de alta autocrítica. la persona no se trata bien a sí misma, se exige mucho y esto hace que los logros o los éxitos pasen desapercibidos y que los fracasos se magnifiquen.

Si la persona con baja autoestima puede darse cuenta de que está inconscientemente filtrando la información y consigue entender que su mente se la está jugando, pienso que ya habría dado un primer gran paso. Para poder cambiar algo, primero hay que darse cuenta de que ese algo está teniendo lugar. Por otra parte, puede trabajar para disminuir el tiempo que pasa en su recreación de lo negativo para empezar a filtrar conscientemente todo aquello que ahora mismo está anulando, poniendo la atención en sus logros por pequeños que le parezcan y en hacer más de lo que le hace feliz. Si te sientes identificado con lo que he dicho anteriormente, en las entradas «Tienes muchas razones para quererte» y «¿Y tú?…¿Te dices «te quiero»?, encontrarás varias herramientas que te pueden ayudar en este proceso de ampliar tu propia versión de la realidad.

Por otra parte, para aquellas personas que quieran dar un paso para mejorar su autoestima y bienestar emocional, recomiendo dos libros que podrían ayudarles en el proceso:

«La inutilidad del sufrimiento» de María Jesús Álava Reyes

– «Deja de ser tú» de Joe Dispenza. Sobre este libro hice una review en la sección de «libros recomendados» del blog

El papel del miedo en la baja autoestima

El miedo suele ser uno de las principales causas por las que abandonamos nuestras metas y nos adentramos en el desánimo. Muchas veces la persona con baja autoestima siente un miedo paralizante a fracasar o a cometer errores y eso le conduce a no actuar. Ella ya se ha encargado de ir llenando su mochila de los fracasos que considera que ha tenido durante su vida, de esos errores que piensa que ha cometido y que, probablemente, no se puede perdonar. Simplemente cree que no necesita un fracaso más, que eso le hundiría más aún. Prefiere permanecer como está que correr el riesgo de dañar aún más su vulnerable autoestima.

Esto es nuevamente un bucle en el que se vuelve a encontrar la persona con la autoestima dañada porque cuanto menos haces, menos consigues y, por tanto, la valoración de ti mismo no se va a alterar. ¿Cómo podemos ir «apuntándonos tantos» en nuestra autoestima? Precisamente teniendo logros, «haciendo» para demostrarnos a nosotros mismos nuestra valía y que somos capaces. Cuando pregunto a mis clientes muchas veces qué han hecho hasta el momento para conseguir sus metas, normalmente me describen algunas acciones que claramente no han sido suficientes para conseguir lo que se han propuesto. No lo han intentado lo suficiente, no han perseverado en el intento de conseguirlo. Han considerado que han hecho lo suficiente o tienen miedo a seguir intentándolo por si fracasan. La gente que tiene éxito, que consigue lo que se propone es porque persevera, porque vive el fracaso o el error como un aprendizaje de lo que no hay que hacer y una oportunidad para seguir probando otras alternativas que le lleven a sus metas.

baja autoestima

El miedo va a estar ahí siempre, es parte de nosotros y lo importante es que aprendamos a manejarlo y a considerarlo como «parte del juego». En la entrada «Actúa a pesar del miedo» hablo más sobre este tema que me parece crucial para mejorar nuestra vida. Asimismo, recomiendo el libro de Pilar Jericó: «Héroes cotidianos: descubre el valor que llevas dentro» para ayudarnos a entender qué papel juega el miedo en nuestro proceso de transformamos positivamente.

Una de las cosas que al menos a mí me ayudan a tomar perspectiva cuando no estoy en el mejor de los días, es ver ejemplos de personas que, a pesar de haberse encontrado con circunstancias adversas en sus vidas, han logrado conseguir sus metas gracias a una actitud luchadora. Una de esas personas es Nick Vujicic, autor de varios libros y conferenciante motivacional. En Youtube encontraréis muchos vídeos testimonio de su vida y conferencias. Me gusta especialmente una de sus frases: «El miedo es la más grande de las discapacidades». La imagen que pongo a continuación, enlaza con uno de los vídeos que más me gustan de Nick:

Nick Vujicic Lectures In Zhengzhou

Pienso que mejorar la baja autoestima no es un proceso rápido que vaya a tener lugar de la noche a la mañana. Transformar esa manera de percibirnos a nosotros mismos no ocurre por arte de magia, pero lo que si tengo claro, es que los protagonistas de esa transformación somos nosotros mismos. Si en este momento tu autoestima no está pasando por un buen momento te recomiendo que ACTÚES, que hagas lo que consideras que te puede ayudar a mejorar tu situación: buscar ayuda profesional, comenzar con la lectura de algún libro de autoayuda sobre el tema, hablar con personas que hayan pasado por la misma situación y ver cómo lo han resuelto, poner en marcha alguna de las sugerencias de ésta y otras entradas del blog relacionadas, etc…

Piensa que no estás sólo en esta lucha, que otros han pensado y sentido como tú y han conseguido mejorar su situación. Cuanto antes empieces a actuar, antes encontrarás alternativas que te ayudarán a sentirte mejor.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos obligatorios están marcados *